La instalación de un cargador para coche eléctrico es un proceso que implica diferentes componentes y trabajos que pueden influir en su coste final. A continuación, explicamos los principales factores que determinan el precio de la instalación:
1. Tipo de cargador
Existen distintos modelos de cargadores, desde los de carga lenta hasta los de carga rápida. Los cargadores con mayor potencia requieren protecciones eléctricas más robustas y un mayor dimensionamiento del cableado, lo que impacta en el coste total.
2. Sistema de balanceo de carga
Si el cargador necesita un balanceador de carga independiente para evitar sobrecargas en la instalación eléctrica, esto añade un coste adicional. El balanceo de carga permite gestionar el consumo eléctrico de forma eficiente y es especialmente útil en viviendas con potencia limitada.
3. Cuadro eléctrico con protecciones
El cuadro de protecciones es esencial para garantizar la seguridad de la instalación. Dependiendo del tipo de cargador y la normativa aplicable, puede incluir interruptores diferenciales, magnetotérmicos y protecciones contra sobretensiones, lo que influye en el precio.
4. Cableado y conducción del cable
El tipo y la longitud del cable necesario para conectar el cargador al cuadro eléctrico influyen significativamente en el coste. Además, si es necesario instalar tubos protectores para el cableado, esto puede aumentar el precio.
5. Tipo de instalación en comunidades de vecinos
Si el cargador se instala en una plaza de garaje en una comunidad de propietarios, puede ser necesario un cable de comunicación BUS para el balanceo de carga y borneros de conexión, lo que incrementa el coste.
6. Pequeño material de fijación
Elementos como abrazaderas, canaletas, tacos y tornillería también representan un coste adicional, aunque suele ser menor en comparación con otros factores.
7. Trabajos de perforación y obra civil
Dependiendo de la ubicación del cargador, puede ser necesario realizar trabajos adicionales como:
- Taladrado del suelo y paso de forjado, si la instalación atraviesa distintas plantas.
- Taladrado de pared y paso por muro, en caso de que el cableado deba atravesar elementos estructurales. Estos trabajos requieren más tiempo y herramientas especializadas, aumentando el coste de la instalación.
8. Legalización de la instalación
la instalación del cargador debe ser legalizada por un instalador autorizado, lo que implica costes de gestión y certificación.
9. Mano de obra
El coste de la mano de obra depende del tiempo requerido para la instalación, que a su vez está condicionado por la complejidad del trabajo y la distancia entre el cuadro eléctrico y el punto de carga. Instalaciones largas o con dificultades técnicas requieren más tiempo y, por tanto, aumentan el precio final.
Conclusión
El precio de la instalación de un cargador de coche eléctrico varía en función de varios factores técnicos y estructurales. Antes de realizar una instalación, es recomendable solicitar un presupuesto detallado que contemple todos estos aspectos para evitar sorpresas en el coste final.